Lanzarote, la cuarta isla más grande del archipiélago canario, es un destino único donde la naturaleza volcánica se funde con el arte, las playas paradisíacas y una rica herencia cultural. Este viaje de cuatro días te llevará a descubrir lo mejor de la isla, desde los paisajes lunares de las Montañas de Fuego hasta la serenidad de las playas de arena dorada, sin olvidar la influencia artística de César Manrique, que ha dejado su sello en cada rincón de Lanzarote. En este itinerario te ofrecemos una guía completa para saber qué ver en Lanzarote en 4 días, con recomendaciones para aprovechar al máximo cada momento. Además, te llevaremos a la cercana isla de La Graciosa, un lugar donde el tiempo parece haberse detenido y las playas vírgenes te harán sentir que has encontrado un pequeño paraíso escondido.
¿Qué ver en Lanzarote?
Día 1: Explorando el sur volcánico de Lanzarote
1. Parque Nacional de Timanfaya
Comenzamos nuestro recorrido en uno de los lugares más emblemáticos de Lanzarote: el Parque Nacional de Timanfaya. Este vasto parque, conocido como las Montañas de Fuego, se extiende a lo largo de más de 50 kilómetros cuadrados y ofrece un paisaje único moldeado por erupciones volcánicas que datan de los siglos XVIII y XIX. Las colinas de lava solidificada y los cráteres forman un entorno que parece salido de otro planeta.

Para explorar el parque, puedes unirte a la Ruta de los Volcanes, un recorrido en autobús que te permitirá ver de cerca las formaciones geológicas más impresionantes. Durante el trayecto, podrás aprender sobre las erupciones históricas que cubrieron la isla de ceniza y lava, creando el desierto volcánico que vemos hoy. Además, en el Islote de Hilario, los guías del parque realizan demostraciones del calor geotérmico, mostrando cómo la temperatura justo bajo la superficie sigue siendo tan alta que el agua se convierte en vapor instantáneamente o que la paja prende fuego al contacto con el suelo.
- Duración: 3 horas
- Coste: 12 €
- Horario: 9:00 a 17:00
- Recomendación: Después del recorrido, puedes almorzar en el Restaurante El Diablo, donde los chefs cocinan la carne y el pescado utilizando el calor natural del volcán, algo que resulta ser una experiencia culinaria única.
2. Las Salinas de Janubio
Nuestro siguiente destino son las Salinas de Janubio, situadas en la costa suroeste de Lanzarote. Estas salinas, en funcionamiento desde el siglo XIX, han sido un elemento clave en la economía local. El paisaje que forman es simplemente espectacular, con grandes estanques de salmuera que brillan bajo el sol y que adquieren distintos tonos según el momento del día, creando un efecto visual maravilloso.
Las salinas son también un lugar ideal para observar aves migratorias y disfrutar de la calma del entorno. Puedes pasear por los alrededores, aprender sobre el proceso tradicional de extracción de sal y comprar productos locales, como la famosa Flor de Sal de Janubio, que es apreciada por chefs de todo el mundo por su pureza y sabor delicado.
- Duración: 1 hora
- Coste: Gratis
3. Los Hervideros
No muy lejos de Janubio se encuentran Los Hervideros, un conjunto de cuevas y acantilados formados por la lava volcánica que se adentró en el mar durante las erupciones. Aquí, las olas del Atlántico golpean con fuerza las rocas, creando un espectáculo natural que hipnotiza a los visitantes. Las plataformas y senderos que rodean el lugar te permiten acercarte a las grietas y ver cómo el agua brota por las chimeneas de las rocas, en un fenómeno que da nombre al lugar.
El contraste entre las aguas turbulentas y las formas caprichosas de la lava solidificada hace de Los Hervideros un lugar ideal para hacer fotos o simplemente admirar la fuerza de la naturaleza en su estado más puro.
- Duración: 45 minutos
- Coste: Gratis
4. El Golfo y la Laguna Verde
Para terminar este primer día de exploración, visita el pequeño pueblo pesquero de El Golfo. Aquí se encuentra la famosa Laguna Verde, una charca de agua salada situada dentro de un antiguo cráter volcánico, cuyo intenso color verde esmeralda contrasta con la arena negra de la playa cercana y las aguas azules del Atlántico. La laguna es uno de los paisajes más fotografiados de Lanzarote, y no es difícil entender por qué.
El Golfo también es un buen lugar para cenar al aire libre en uno de los restaurantes que ofrecen pescado fresco y marisco. La especialidad local, la vieja a la plancha, es un plato delicioso que no deberías perderte.
- Duración: 1 hora
- Coste: Gratis
Día 2: Arte y naturaleza en Lanzarote
1. Fundación César Manrique
El segundo día lo dedicamos a explorar la influencia del artista más importante de la isla, César Manrique. Su legado está presente en muchos de los rincones de Lanzarote, y su antigua residencia, hoy convertida en la Fundación César Manrique, es el mejor lugar para empezar. La casa está construida sobre burbujas volcánicas naturales y combina a la perfección arquitectura y naturaleza. Dentro, podrás admirar no solo su obra, sino también su colección de arte contemporáneo, que incluye obras de artistas como Picasso y Miró. Como puedes comprobar, la mayor parte de cosas qué ver en Lanzarote tienen mucha relación con el artista.
Manrique fue un defensor incansable de la conservación del paisaje natural de Lanzarote, y sus ideas sobre la sostenibilidad y la integración del arte en la naturaleza siguen siendo inspiradoras.
- Duración: 2 horas
- Coste: 10 €
- Horario: 10:00 a 18:00
2. Jameos del Agua
Otro de los grandes logros de Manrique es Jameos del Agua, un espacio cultural construido dentro de un tubo volcánico. Este lugar alberga un lago subterráneo donde viven cangrejos albinos, una especie única en el mundo. Además de su valor natural, Jameos del Agua es un lugar de impresionante belleza, con jardines tropicales, una piscina blanca y una sala de conciertos que aprovecha la acústica natural de la cueva.
Es un lugar ideal para descansar y dejarte envolver por la calma del entorno, todo ello con el toque artístico inconfundible de Manrique.
- Duración: 2 horas
- Coste: 10 €
- Recomendación: Almuerza en el restaurante de los Jameos del Agua, donde podrás disfrutar de una comida en un entorno volcánico único.
3. Cueva de los Verdes
Cerca de Jameos del Agua se encuentra la Cueva de los Verdes, otro túnel volcánico que en el pasado sirvió de refugio a los habitantes de la isla durante los ataques piratas. Hoy en día, es una de las atracciones turísticas más fascinantes de Lanzarote, gracias a las impresionantes formaciones geológicas y al juego de luces que realza su belleza. El recorrido guiado te llevará a lo largo de galerías y cuevas que revelan los secretos de este antiguo tubo volcánico.
Y recuerda que si te cuentan un secreto durante la visita ¡mantenlo! 😉


- Duración: 1,5 horas
- Coste: 10 €
4. Mirador del Río

Finaliza el día en el Mirador del Río, otra creación de Manrique situada en lo alto del risco de Famara, a unos 475 metros sobre el nivel del mar. Desde este punto privilegiado, tendrás unas vistas espectaculares de la isla de La Graciosa y el archipiélago Chinijo, que se extiende hacia el norte. El mirador está perfectamente integrado en el paisaje, como es característico en la obra de Manrique, y te ofrece la oportunidad de contemplar el océano y las islas circundantes en todo su esplendor.
- Duración: 1 hora
- Coste: 5 €
Día 3: La Graciosa, la octava isla canaria
Cómo llegar a La Graciosa
En este tercer día nos embarcamos en una excursión a La Graciosa, una pequeña isla que forma parte del archipiélago Chinijo y que se encuentra al norte de Lanzarote. La Graciosa es un lugar donde el tiempo parece haberse detenido, con sus paisajes volcánicos, playas de arena dorada y su ambiente relajado.

Para llegar a La Graciosa, debes tomar un ferry desde Órzola, en el norte de Lanzarote. El trayecto dura aproximadamente 30 minutos y varias compañías operan con frecuencias diarias. Puedes ir con Líneas Romero, por ejemplo.
- Precio del billete: 26-28 € ida y vuelta
- Horarios: Desde las 8:30 hasta las 19:00 en temporada alta (consulta horarios previamente)
- Duración del trayecto: 30 minutos
Qué ver en La Graciosa
Al llegar al puerto de Caleta de Sebo, el principal núcleo habitado de la isla, estarás listo para explorar los encantos de La Graciosa. La isla es perfecta para quienes buscan un día de naturaleza y tranquilidad. Puedes alquilar una bicicleta (unos 10-12 € al día) o caminar por sus senderos.
1. Playa de Las Conchas
Una de las playas más impresionantes de la isla es la Playa de Las Conchas, situada en el norte. Con sus aguas turquesas y su arena blanca, esta playa es ideal para relajarse y desconectar. Sin embargo, ten en cuenta que las corrientes son fuertes, por lo que es mejor disfrutar del paisaje que nadar en sus aguas.
- Duración: 2 horas
- Coste: Gratis
2. Montaña Amarilla
Otra opción para los más aventureros es realizar una caminata hasta la Montaña Amarilla, un volcán cuya ladera adquiere un característico color amarillo. Desde la cima, tendrás vistas panorámicas sobre toda la isla y el océano Atlántico. La caminata es accesible y muy gratificante.
- Duración: 1,5 horas ida y vuelta
- Coste: Gratis
3. Playa La Francesa
Si prefieres una playa tranquila para nadar, Playa La Francesa es una excelente opción. Está ubicada cerca de Caleta de Sebo y es famosa por sus aguas cristalinas y su arena suave. Además, es un lugar perfecto para practicar snorkel y observar la vida marina en aguas poco profundas.

- Duración: 2 horas
- Coste: Gratis
Dónde dormir en La Graciosa
Si deseas pasar la noche en La Graciosa, lo mejor es alojarse en Caleta de Sebo, donde hay algunas opciones modestas pero cómodas. Entre ellas, puedes encontrar apartamentos con vistas al mar o pensiones familiares.
- Recomendaciones de alojamiento:
- Evita Beach House
- Pensión Enriqueta
- Coste por noche: 50-90 €, dependiendo de la temporada
¿Qué ver en Lanzarote?
Día 4: Playas y pueblos históricos en Lanzarote
1. Playa de Papagayo
De vuelta en Lanzarote, el cuarto día te llevará a una de las playas más famosas de la isla: Playa de Papagayo. Situada en el sur, en la zona protegida de Los Ajaches, esta playa es conocida por su arena dorada y sus aguas turquesas, ideales para nadar y hacer snorkel. Aunque es una playa muy popular, su acceso remoto y la belleza del entorno natural la hacen sentir como un pequeño paraíso escondido.

- Duración: 3 horas
- Coste: Gratis, aunque el acceso en coche tiene un coste de 3 € por aparcamiento
2. Puerto del Carmen
Después de disfrutar de la tranquilidad de Papagayo, dirígete a Puerto del Carmen, uno de los núcleos turísticos más importantes de Lanzarote. Su paseo marítimo está lleno de restaurantes, bares y tiendas, y es un buen lugar para disfrutar del ambiente relajado de la isla. Si tienes tiempo, también puedes pasar la tarde en alguna de sus playas, como la Playa Grande, que cuenta con todos los servicios necesarios.
- Duración: 2 horas
- Coste: Gratis
3. Jardín de Cactus
Para cerrar el día, visita el Jardín de Cactus, otra obra maestra de César Manrique. Este jardín, situado en un antiguo cráter volcánico, alberga más de 4.500 especies de cactus de todo el mundo, organizadas en terrazas circulares. Es un lugar donde el arte y la naturaleza se encuentran de nuevo en perfecta armonía.
- Duración: 1,5 horas
- Coste: 6 €
Qué ver en Lanzarote y La Graciosa en 4 días
Este viaje de cuatro días por Lanzarote y La Graciosa te ofrece una experiencia completa de lo que estas islas tienen para ofrecer. Desde los paisajes volcánicos surrealistas del Parque Nacional de Timanfaya hasta las tranquilas playas de Papagayo y La Graciosa, cada día revela una nueva faceta de este increíble destino. La influencia de César Manrique se siente en cada rincón, recordándonos la importancia de la conservación y el respeto por la naturaleza.
Si te preguntas qué ver en Lanzarote en 4 días, la respuesta es que hay tanto por descubrir que un solo viaje no es suficiente. Sin embargo, este itinerario te permitirá sumergirte en la esencia de la isla y disfrutar de su sorprendente combinación de arte, naturaleza, historia y relax.